22 marzo 2005


En el calor de la batalla por el dominio del aire, durante la Primera Guerra Mundial, en una época en que la expectativa de vida de un piloto era de tres semanas, los jóvenes aviadores de ambos bandos se protegían con amuletos para la buena suerte y se rodeaban de supersticiones. Entre los aviadores alemanes que pilotaban máquinas voladoras hechas con lona y cuerdas, se creía en una superstición, la más importante de todas: no ser fotografiado antes de una misión. Sólo tras cumplirlas, los pilotos permitían que una cámara fotográfica registrara sus victorias.

El 21 de abril de 1918 por la mañana, el barón Manfred von Richthofen. el más mortífero de los ases que la guerra aérea haya conocido jamás, se burló de esa superstición. Se detuvo para jugar con un perrito en la puerta del hangar que albergaba su triplano Fokker, pintado de rojo brillante. Y entonces sonrió al objetivo de una cámara, sostenida par un visitante del campo de aviación.

El barón van Richthofen podía permitirse el lujo de desafiar la superstición. Después de todo, a los 25 años de edad, era el más famoso aviador del mundo. Se lo consideraba casi invencible. El día anterior había derribado su avión número ochenta. Era un héroe nacional, conocido comO El Caballero Rojo de Alemania o el Barón Rojo, a causa del «circo aéreo» que lanzaba dos veces cada día sobre los cielos de Francia y Bélgica. Allí, causaba estragos entre los aviones británicos, franceses, australianos y canadienses.

Información obtenida en:http://www.editorialbitacora.com/armagedon/

Que rápido mueren los mitos. Un día eres un héroe y a la mañana siguiente eres la fotografía de tu inerte cuerpo, cayendo sobre tu tierra para desmoralizar a tus compañeros. Nunca sabemos cuando llega nuestro momento, nunca sabemos que puede ser nuestro desencadenante, lo que nos lleve al fin... ¿podremos volver si tenemos algo pendiente? da igual, es lo de menos, como dicen los Saratoga, no quiero saber lo que hay detrás del telón, bastante tengo con lo que veo a diario jajaja...

en fin, hoy en vez de cita, una genial y legendaria letra de cancion del grupo que tomó a este protagonista como nombre para su grupo, y para este himno:

Mítico Barón
Dónde quedó
El vuelo fugaz
De tu gran avión
Barón
Pionero audaz
El aire fue
Tu pasión
Y otro avión
Te destruyó

De héroe nacional
Pasaste a ser
Cómic en papel
No es un mal final
Barón
Y en tu rojo avión
Vas a volar
Sin cesar
Pues así
No morirás

Barón, héroe de cuento
Amo de las nubes,
Señor del viento
Barón, vives un sueño
Triste y solitario
Surcando el cielo
Barón, tu triste misión
No apagó tu gloria

Esa guerra cruel
Terminó
Pero sigue aún
El mundo en tensión
Barón
Si vivieras hoy
Podrías ser
Capitán
De una nave espacial

Barón, héroe de cuento
Amo de las nubes,
Señor del viento
Barón, vives un sueño
Triste y solitario
Surcando el cielo
Barón, tu triste misión
No apagó tu gloria

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Nuala (2 lazy to log in)

Vichen...
Para cuando Hijo de Cain?
:D
Gracias por la historia del Baron Rojo. Si por algo no me gustan las fotos

Anónimo dijo...

Ooooh... me acabo de acordar de la última vez que vi a Baron Rojo, en la Sala Stereo de Alicante. Una mierda sala con capacidad máxima para 400 personas en la que debía haber unas 500. El concierto (de casi tres horas) fue cojonudo, pero cuando salí debía haber perdido como tres kilos (que recuperé en el bar al salir, no os preocupeis) y no podía levantar los brazos ni para encenderme un pitillo.

Larga Vida al Barón!
xD

LuMi